El salto con pértiga es una prueba del actual atletismo que tiene por objetivo superar una barra transversal situada a gran altura con la ayuda de una pértiga flexible. Esta pértiga tiene normalmente de 4 a 5 metros de longitud y suele ser de fibra de vidrio y carbono, materiales que reemplazaron al bambú y al metal en la década de 1960.
Una vez puesta la pértiga en el cajetín el atleta se elevará y se encontrará con una barra transversal esta barra es una barra de metal de 5 metros y un peso aproximado de 2,3 kgs.
Esta barra está sujetada por dos postes o saltómetros, que son separados entre sí por 4,26 metros, con estanquillas de 3 pulgadas para sostener la barra, además marcarán la altura saltada.
Superada la barra el atleta caerá sobre una colchoneta de aterrizaje, que es acolchada y cuadrada con 5 metros de lado. Los competidos calzarán zapatillas con clavos.
Esta prueba, requiere una buena velocidad de carrera, músculos fuertes en la espalda y una gran habilidad gimnástica, figura en el programa oficial de los Juegos Olímpicos desde su primera edición, celebrada en 1896 en Atenas, en los que respecta a la categoría masculina. La categoría femenina no debutó hasta la edición del año 2000, celebrada en Sidney.
Es la antepenúltima de las diez pruebas de atletismo en la categoría de decatlón hombres y tercera en mujeres y también penúltima de las 7 pruebas del heptatlón hombres ( pista cubierta).
A continuación os dejo un vídeo de una de las mejores atletas y la mejor saltadora de pértiga de la historia Yelena Isinbayeva :
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